28.7.10

MI VERDAD SOBRE LOS LIBROS Y LA TELEVISIÓN…

Últimamente han pasado tantas cosas en semanas recientes que, además de que no podría abarcar todo lo que ha ocurrido, no sabría ni cómo empezar. Así que me avocaré a lo que el encabezado de esta entrada dice.

Como medianamente saben quiénes no viven bajo la tierra, en la doble “H” ciudad de México abundan recientemente las “ferias del libro” por todos lados, por aquí, por allá, acullá. Esto ha ocasionado una serie de celebraciones en diversos lugares con actividades culturales, recomendaciones de libros a por mayor, esclavos del servicio social haciendo trabajos humillantes propios de su condición infrahumana, etc.

Por otra parte tenemos la televisión y su afán por volvernos esclavos de ella. Ese bendito aparato al que muchos aprendimos a amar antes de que los Simpson la idolatraran frente a su sillon rojo. Lo he dicho antes y lo repito: Me gusta ver la televisión AUNQUE CASI NO LO HAGO y me gusta también (algo de) la programación que pasa en ella.

¿Cómo combinar estos 2 puntos mencionados, para crear un post de medidas catastróficas en pro de la cultura? sencillo: Ayer revivió entre charlas de típicos “falsos-intelectuales” de starbuck’s el pendejísimo cliché de que los libros son superiores a la televisión y que hay que ponerse a leer mucho para no ser un perdedor. Por favor, ya lo dije antes, leer no es la mejor actividad del mundo ni la más cultivadora!!!!

Es típico escuchar por esta zona (Polanco) donde se encuentra mi trabajo, recomendaciones de libros, dadas por tipos que se creen superiores por que traen bajo el brazo algún tomo de la serie “crepúsculo” o “Harry Potter” alegando que en la televisión pasa pura porquería y que los libros son un canal inmejorable por el cual se transmite cultura y conocimiento.
A ver, a ver, a ver, a ver, vayamos por partes, hare un par de sentencias que ustedes mismos (finísimos seguidores) responderán en automatico:

¿Leer es bueno?:




















¿Ver televisión es malo?:

Ya nos vamos entendiendo??
A ver, otra vez: ¿Leer es bueno?:



















¿Ver televisión es malo?:
















¿Aun no quedó claro? Va una vez más.
¿Leer es bueno?:
















Y ¿ver televisión es malo?:





 Ya lo entendieron ¿verdad?

Leer no es bueno por sí mismo, de la misma forma en que ver televisión no es malo "per se". El problema está en lo que uno consume. La lectura es un concepto, no sobrevalorado, sino mal comprendido. La lectura no da súper poderes, ni aumenta la calidad moral, intelectual, ética, ni da estatus (si acaso el estatus de ñoño, no más), ni son todos los libros fuente de conocimiento, ni nada de eso.

Por su parte, si bien es verdad que la televisión (abierta o de paga) está plagada en su mayoría de mierda mata neuronas, también tiene contenido que vale la pena ver.

El mismo caso lo pondría en la Biblia por ejemplo (para los radicales), claro que hay pasajes agradables: Aquellos que son cuidadosamente seleccionados por el sacerdote los domingos. Pero lo que es un hecho es que si encuentras chocolate en una pila de estiércol no te lo comes ¿O sí? Yo si... que diga; YO NO!!.

Lo poco bueno esta arruinado por lo malo que lo rodea.

Con ese razonamiento no podríamos leer ni ver nada, puesto que todo es estiércol y chocolate, desde la misma Biblia que trae chocolatitos muy sabrosos, hasta el Tratado de ateología de Onfray que trae unas plastas de mierda intragables. Aunque cabe mencionar que dicho "tratado" ya cuenta con la respectiva campaña de intoxicación de los afines a las jerarquías católicas con la consabida recomendación de que no se lea. Ya saben que los católicos guardan con celo su gran capital: la ignorancia.
Es necesario (aunque no es "at ovum") que sepamos y podamos extraer de cada obra lo valioso de ella.

Existe un buen número de razones que se podrían exponer para denigrar a la literatura light, aquella que está diseñada para las mayorías. Las novelas, para ser más exactos, como las escritas por D. Brown, J. K. Rowling, P. Coelho, S. Meyer y otros, son accesibles en el sentido de que uno puede quedarse cómodamente a nivel de la trama; si uno decide ir más allá, será posible, pero no por una cualidad abierta de la obra o una deliberada racionalidad puesta ahí por el autor; más bien por una muy generosa capacidad mediocre llamada, intento de lector.

El lector contemporáneo es fácilmente seducido por la imagen directa (la que percibimos al ver televisión, no la que se sesga en una metáfora), que se expresa en el mero plano de la anécdota, la cultura del otro de forma inmediata, el folclore y la ilusión de profundidad hermenéutica, donde sólo hay falacia, error histórico, intentos penosos de sapiencia, fantasía fácil y superación personal del éxito disfrazada de filosofía budista.

Gran consumidor de bienes y patrimonios internacionales, el lector actual busca asimilar el conocimiento: ser genio de forma espontánea. Les hemos dicho incansablemente a las nuevas generaciones, implícita o explícitamente, que leer libros los hará sabios; y esto es una gran farsa.

No sólo basta leer, sino saber leer; no sólo cualquier libro, sino un grupo selectivo de obras probadas. No hemos puesto suficiente énfasis en lo segundo. Deambulan por cada rincón del planeta: aquellos intelectuales “cool”, con la colección completa de Meyer, Coelho y Brown en sus mochilas, siendo la lamentable caricatura del académico amargado, pero que desprecia, con suficiente autoridad y conocimiento, la superficialidad de los libros basura.

Tal vez nos conviene que las masas sigan embrutecidas con los hits editoriales y nadie ha podido intuir la macabra estrategia que se esconde debajo de todo el mecanismo. No pierdo de vista que probablemente dentro de unos cien años, nuestra literatura light sea canónica (lo dudo, en poco tiempo se olvidó el fenómeno Potter). Pero eso les tocará a los futuros críticos. En nuestro presente, las novelillas pseudo-profundas sólo han generado, análogamente, la ilusión de un corpus serio, que puede ser estudiado como a Cervantes o a Kafka, cuando en realidad sólo es posible evidenciar la producción de un hilarante lector light.

Es una maravilla que, dados los tiempos que estamos viviendo tengamos al alcance información de todo tipo: Chingona, buena, mediocre, mala, pésima. Pero resulta que, para que podamos hacer una selección eficaz para extraer lo valioso de cada cosa, necesitamos estar expuestos a todo. Es decir, necesitamos conocer el estiércol para distinguirlo del chocolate. Necesitamos haber leído alguna vez La Prensa para valorar La Jornada. Necesitamos haber leído a Carl Sagan para saber a qué tirarle con Deepak Chopra, así como yo tuve que leer a Carlos Cuauhtémoc Sanchez, para valorar el “Sensacional de Maistros” (ya que este último tiene buenos dibujitos). Y podemos citar así muchos ejemplos más para poder desarrollar nuestro "ojo clínico" y poder distinguir que tipo de información es la que queremos consumir incluso la mala ya que a todos nos gusta dormir, de vez en cuando nuestras neuronas.

Este post surgió a razón de unos peleles que han promovido vía e-mail la campaña de dejar de ver Televisa por 48 horas y demas cosas por el estilo. Normalmente, cuando surge una campaña de estas me burlo hasta aburrirme. Ésta en particular me dio mucho coraje porque trivializa y desprestigia una forma de protesta y un medio de presión que sí puede resultar efectivo, estoy hablando de El boicot.

El boicot o embargo, definido como "negarse a comprar, vender, o practicar alguna otra forma de relación comercial o de otro tipo con un individuo o una empresa considerados, por los participantes en el boicot, como autores de algo moralmente reprobable" resulta, a diferencia de otras como la Marcha por la Paz o la Marcha contra la inseguridad, una opción que sí podría surtir efecto si se aplica bien. Por ejemplo:

1. Yo tengo mi changarrito. Un cibercafé. Si mis clientes vienen a exigirme y a hacerme una marcha para que yo baje los precios o les regale algo, puedo con una mano en la cintura, pintarles dedo.
Peeero si los clientes se ponen de acuerdo y, sin andar haciendo faramallas, nomás ya no vienen, mi negocio simplemente vale madres.

Pongámoslo simple "intelectuales chafas":
Nosotros pagamos por bienes y servicios. Si no nos gusta alguno no nos vamos a poner a exigir que lo cambien, nomás ya no lo compramos. Punto.
Con la televisión es lo mismo.
¿Cuándo quitan o cambian un programa?
Cuando nadie lo ve!!!!.
¿Es tan difícil de entender?

¿No les gusta lo que hay en la tele? No la vean
¿No les gusta el servicio de Telcel? No lo compren
¿No les gusta el pan Bimbo? No se lo traguen.
Vayan a leer las secuelas de Crepúsculo, Harry Potter y Caballo de TROYA en la cadena cafetera de su preferencia...

Pero a mi, no me esten chingando!!!!

16.7.10

LECCIONES CIENTIFICO-CULTURALES CON EL TECUAN...

Hace no muchos días fue menester de dialogo, un tema científico entre diversos integrantes de la caterva, respecto a las reacciones varoniles, primitivas y machistas (de macho α “alfa” por supuesto) que tenemos los entes de género masculino al encontrarnos cara a cara con nuestros destinos femeninos, el tema científico al que me refiero se llama reflejo de Flehmen. Y es por eso oh hermanos que vengo ante ustedes para deleitarlos con un buen verbo, digno de los anales de la BBC.

Esta también es palabra del Tecuan:
- Todos dicen: ¡Te alabamos Señor Tecuan!

El asunto aunque delicioso, es complicado, ¿han notado acaso las reacciones que tenemos (hombres y mujeres) cuando nos topamos frente a frente con aquel ser que –coloquialmente dicho- “nos mueve el tapete”?

Los hombres, por citar algunos ejemplos; adoptamos una postura más firme, enderezamos la espalda, ensanchamos los hombros, hacemos un poco tensión corporal para que nuestros torneados y tonificados bíceps reluzcan y le griten a aquella fémina en cuestión:

- Hey nena, aquí estoy, si, así es, me encontraste y bien que me mereces, tómame!!!! (todo esto con una voz a la Johnny Bravo)

En el caso de las nenas, ocurren cosas similares, aunque más baratas, (jejejeje, no es cierto), levantan el busto, las caderas, erguen la espalda, se dilatan sus pupilas y retraen sus labios de una forma que hace que parecen estar haciendo una mueca. Este gesto se adopta para ayudar así a exponer el órgano vomeronasal y atraer moléculas de olor... si exacto; olor sexual!!

Bueno, continuando con el camino científico, algo muy peculiar ocurre conmigo cuando olfateo por ejemplo; bragas de mujeres. Mi cara se transforma bruscamente, bastante parecida a la de un Leon africano en celo. A este tipo de reacción los biólogos se refieren como respuesta de Flehmen (o cara de felino depravado como a mí me gusta llamarle).

La famosa cara de león depravado que obtenemos algunos hombres al oler calzones femeninos e incitar a una mujer a la reproducción.

Claro, claro, yo soné muy grotesco y voyerista (me disculpo por eso), ya que esa respuesta no obedece solamente a la reacción de olfatear ropa femenina, también la obtenemos por ejemplo, al oler un perfume fino en algún cuello sensual o aquel humorcillo que emanan las mujeres cuando están en sus “días fértiles”.

Probablemente ustedes ya hayan visto en los documentales del Discovery Channel esta respuesta, en un gato, o en un caballo cuando estos terminan de olfatear orines de alguna hembra en celo.

La respuesta de Flehmen sucede luego de que algún mamífero (más notables son los felinos, ungulados o equinos) examina los olores originados por otros de la misma especie, entonces los músculos faciales de los animales se retraen abriendo la boca un poco y contrayendo los músculos alrededor de los ojos de manera que los productos químicos que se desean examinar lleguen con mayor facilidad hasta el ya mencionado órgano vomeronasal —o de Jacobson, también conocido así—; el cual solo poseen mamíferos tetrápodos, y una que otra especie salvaje como yo y como cualquier otro macho α “alfa” de los alrededores; y que nos sirve para identificar los olores de los compuestos químicos (los cuales por lo general son orines).

A continuación les pongo una explicación gráfica del proceso de inhalación-respuesta en personas con un sentido del olfato tan extraordinario como el mío.


¡Magnifica cara de león depravado!

No me fue posible bosquejar más que los reflejos externos que los olores de calzones de mujer hermosa tienen sobre mí. Pero mentalmente es algo mucho más complejo. Me atrevería yo a decir, sin temor a equivocarme que es una especie de elevación de conciencia, un efímero nirvana pletórico de endorfina que va más allá de toda comprensión humana, incluso de la mía.

Y bien. Ahora ya saben un buen método para poner una buena cara de depravado.

Ninguna mujer me va a negar que aquello que vieron lo encuentran muy pero muy excitante en un hombre.

Aquí les muestro más imágenes de este curioso fenómeno en otros animales:
Un hermoso tigre siberiano sacando la lengua impúdicamente, como la muestra más grosera y lasciva de la necesidad de saciar ese instinto primitivo de reproducción, como buen macho.
Los caballos son conocidos por ser uno de los animales más calientes del reino animal, además de ser de los que “calzan más grande”. En esta foto se podría pensar que el semental le está diciendo a una yegua —de quien acaba de oler sus orines— alguna finura como: "Aaay mamacita... dime el nombre de tu obstetrista equino para irle a chupar los dedos" o "Déjame agarrarte de carrusel hasta que vomites". (lo que tengo que escribir en pro de la ciencia!!!!)
Luego tenemos a los felinos menores que a mi parecer son la especie que pone las mejores caras de depravado en el reino animal debido a su naturaleza misteriosa y antisocial. Son animales raros, huidizos y silenciosos, y cuando tienen la respuesta Flehmen parecen unos verdaderos enfermos mentales de lo más aborrecible. Este vicioso de arriba no es la excepción. ¿¿¿No les recuerda al villano de Kung Fu Panda???

Les juro que nunca había visto un rostro tan degenerado en toda mi vida hasta que me topé con este gato. Sólo mírenlo. Parece que acaba de inhalarse medio litro de orines en el jardín del vecino cuando nadie lo veía ¡hasta le lloran los ojos! Seguramente este pervertido acaba de tener unos cinco orgasmos con tan solo imaginarse las curvas de la gatita. Tras este horrendo acto de la esnifada urinaria debe de estar pensando en doce mil maneras diferentes de aparearse, y no sólo con gatas...
Bueno, la verdad envidio al gato... en esa posicion mi imaginación tambien sería asquerosa y mi rostro...

... diablos me estoy excitando!!! 



… … …

... ... ... ...  ...   ...  (censurado por actividad onanista)

[27.6 minutos despues]...

...Así es hermanos, tantos años de evolución no han podido erradicar nuestras más salvajes pasiones y jamás podremos negar nuestro maravilloso diseño antropológico, biológico y sobretodo primitivo instinto copulatorio en favor de la preservación de la especie ahora y siempre, por los siglos de los siglos santos Amén!!! [ejem.. ejem…]

Bueno, informo para ustedes, El Tecuan

Podéis ir en paz, la cátedra ha terminado
Vayan, vayan y prediquen mi Evangelio!!!!